Mientras Cali se proyecta como una ciudad de crecimiento y eventos globales, un reportaje periodístico desentierra otra cara: una ciudad subterránea donde cientos de personas han vivido durante décadas en la sombra. "Cali Bajo Tierra", del periodista Hugo Mario Cárdenas y el fotógrafo José Luis Guzmán, es más que una historia llamativa. Es un ejercicio de periodismo con responsabilidad social que obliga a mirar de frente una deuda pendiente con los más vulnerables.

El periodismo como espejo social

El reportaje no se queda en la denuncia rápida. A través de testimonios directos y fotografías sin adornos, construye un relato humano sobre la exclusión. No habla solo de cifras: muestra a Víctor "El Mocho" Restrepo, que perdió una pierna y terminó viviendo bajo un puente; a Lilia María Castañeda, desalojada del basuro de Navarro tras promesas que nunca se cumplieron; y a Julián Villaquirán, cuya vida se vino abajo después de varias rupturas personales. El trabajo cumple una de las funciones centrales del periodismo social: poner rostro, nombre y contexto a lo que suele quedarse en estadísticas.

Dar voz a quienes no la tienen

La responsabilidad de un medio no es solo informar, sino amplificar las voces que casi nunca aparecen. "Cali Bajo Tierra" lo hace al mostrar la crudeza de la supervivencia, pero también los proyectos y expectativas que siguen vivos. El Mocho cuida un pequeño jardín en el separador vial y sueña con montar un kiosco de jugos. Lilia María revisa su celular a la espera de una llamada que le confirme una vivienda. Sus historias recuerdan que incluso en condiciones extremas hay dignidad, agencia y deseo de futuro.

Impacto y agenda pública

El alcance de un trabajo como este se mide en su capacidad de entrar en la agenda pública. Al recoger la voz de la concejal Alexandra Hernández sobre las cerca de 8.000 personas en condición de calle en la ciudad, el reportaje conecta las trayectorias individuales con la responsabilidad institucional. Señala los efectos del desalojo de Navarro, las promesas de reubicación incumplidas y las limitaciones de las políticas sociales actuales. Es, en la práctica, un llamado a la acción para autoridades y ciudadanía.

Por su rigor y su impacto, "Cali Bajo Tierra" se reconoce como candidato ideal al Premio Xilópalo 2025 en la categoría Responsabilidad Social, con "Atrapados, infancia perdida en las calles de Medellín" en segundo lugar y "Renacer en el Valle para transformar vidas con educación. Del paraíso verde del Valle del Cauca, a la educación que transforma" en tercera posición.

Desde el Premio Nacional de Periodismo Digital Xilópalo queremos agradecer de manera muy especial a nuestros aliados Crowe, Kasa Agencia, el Círculo de Periodistas de Bogotá (CPB) y ProColombia. Su compromiso con la libertad de prensa, la innovación digital y la formación de audiencias críticas hace posible que trabajos como este lleguen más lejos y sigamos construyendo, juntos, un mejor ecosistema para el periodismo en Colombia.